28 de abril de 2020 |

6 consejos para entrenar sin lesiones ni molestias

Después más de un mes de confinamiento, son muchas las personas que cuentan los días para la vuelta a la normalidad y a los entrenamientos. Sin embargo, tras semanas de inactividad, el riesgo a perder la forma aumenta y, con él, las probabilidades de sufrir molestias, contracturas, desgarros e, incluso fracturas durante la práctica deportiva. ¿Quieres saber cómo volver a entrenar sin lesiones?

Tan solo debes seguir estos consejos:

1. Calienta

Aunque calentar es una práctica habitual en los deportistas profesionales, no lo es tanto en los aficionados u ocasionales. Muchas personas olvidan que el calentamiento nos ayuda a preparar nuestros músculos y articulaciones para la práctica deportiva y, por tanto, a reducir el riesgo a sufrir daño en los mismos. Si quieres entrenar sin lesiones, este es un apartado que no puede faltar en tu rutina de ejercicios.

2. Ve poco a poco

Otro de los errores que cometen muchas personas cuando vuelven a entrenar es hacerlo de forma intensa. Como hemos comentado anteriormente, tras un periodo de inactividad, nuestros músculos pierden tono y nuestras articulaciones, elasticidad. Someterlos a estrés solo puede originar molestias, contracturas, desgarros y, en algunos casos, fracturas. Por eso, lo mejor para entrenar sin lesiones es hacerlo en sesiones cortas y adaptadas a nuestro estado físico. Ya habrá tiempo de subir la intensidad conforme vayamos adquiriendo fuerza y resistencia.

 

Estirar y calentar son claves para entrenar sin lesiones

 

3. Vigila la técnica

Hacer ejercicio sin técnica es una de las causas más habituales de lesión. Por eso es tan importante prestar atención la ejecución de cada movimiento y recurrir a un entrenador personal si no disponemos de los conocimientos necesarios para hacerlo. Además de guiarnos durante la práctica deportiva, nos motivará a que no tiremos la toalla y continuemos con un hábito tan beneficioso para la salud como el ejercicio físico.

4. Protege tus músculos y articulaciones

Para evitar lesiones, además de realizar ejercicio de forma gradual, será necesario hacerlo por grupos musculares. De esta forma, evitaremos que se sobrecarguen y dañen. Podemos, por ejemplo, trabajar la parte superior un día y la inferior a la siguiente con el objetivo de no someter los músculos a un estrés excesivo.

También será conveniente el uso de ortesis y, más, cuando realizamos deportes de alto impacto. En Teyder, contamos con muñequeras, coderas, rodilleras y tobilleras especialmente diseñadas para proteger las articulaciones durante los entrenamientos. Su uso no solo nos protegerá de nuevas lesiones, también evitará que recaigamos en aquellas que hemos padecido con anterioridad.

teyder rodillera

5. No te olvides de estirar

De la misma forma que es importante calentar antes de cada entrenamiento, lo es estirar después de la práctica deportiva. Hacerlo nos ayudará a activar la circulación sanguínea, ganar flexibilidad y, claro está, evitar roturas de fibras y contracturas musculares.

6. Atento al equipo

Si queremos entrenar sin lesiones, es necesario hacerlo con el equipo deportivo adecuado. ¿El calzado que utilizas es el adecuado? Y la ropa ¿te protege del sol, del viento, del sudor o de las rozaduras? No es lo mismo practicar running que yoga o escalada y el uso de una equipamiento inadecuado te puede causar lesiones musculares, articulares y cutáneas. 

En Teyder estamos especializados en ortesis deportivas. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

9 de abril de 2020 |

Limpiar la silla de ruedas es clave en época de Coronavirus

Lavarse las manos al llegar a casa, taparnos la boca al estornudar o toser… Son hábitos que siempre han formado parte de nuestro día a día. Sin embargo, no ha sido hasta la aparición del Coronavirus Covid-19, que han adquirido verdadera importancia.

Y es que, como hemos podido comprobar estas semanas, nuestra salud depende de ellos. Los virus y bacterias se trasmiten por el aire y pueden vivir de uno a cuatro días en materiales como el cartón, el acero inoxidable o el plástico. De ahí que sea tan necesario mantener unas buenas rutinas de higiene personales y trasladarlas a otros ámbitos de nuestra vida. Ahora más que nunca, debemos airear y desinfectar nuestra casa, mantener a punto el coche y, claro está, limpiar la silla de ruedas de forma regular. Hacerlo no solo nos ayudará a evitar contagios, sino también a ser foco de infecciones.

Pero, ¿cómo limpiar una silla de ruedas

Limpiar una silla de ruedas no es más complicado que limpiar un sofá o un cochecito de bebé. Tan solo, deberemos saber qué zonas son susceptibles de acumular más gérmenes y suciedad y tomar ciertas precauciones antes de hacerlo.

Por ejemplo, es recomendable utilizar guantes para limpiar una silla de ruedas. No podemos olvidar que, más allá del Coronavirus Covid-19, los neumáticos están en contacto con el suelo y acumulan toda clase de bacterias. También es necesario leer las recomendaciones de cada fabricante acerca del modo de limpieza de cada vehículo. Así evitaremos dañar la silla de ruedas con productos inadecuados.

  • Asiento y respaldo: las personas que van en silla de ruedas suelen pasarse en este vehículo gran parte del día, acumulando estas zonas suciedad y malos olores. Si tenemos la posibilidad, será recomendable extraerlos de la silla de ruedas y lavarlos en lavadora. En caso de que el fabricante no lo recomiende, deberemos desinfectarlos con ayuda de un paño y solución antibacteriana.
  • Reposabrazos: el roce y el sudor pueden ensuciar el reposabrazos y, peor aún, convertirlo en un foco de gérmenes. Limpiar esta parte de la silla de ruedas es clave. Para hacerlo, podremos utilizar una solución elaborada con agua y lejía.
  • Ruedas: como hemos comentado anteriormente, los neumáticos están en contacto con el suelo y acumulan gérmenes y suciedad. Por eso, para desinfectarlos, será necesario utilizar la misma solución que con el reposabrazos.
  • Puños de empuje: los puños, al igual que las ruedas, son uno de los focos de infección más importantes de una silla de ruedas. Por eso, será necesario limpiarlo con una solución a base de lejía y agua y, si nos encontramos en la calle, con un gel antibacterias.
  • Yostik y aros de propulsión: si vamos a limpiar una silla de ruedas, no podemos olvidarnos de desinfectar yostik y aros de propulsión con solución antibacteriana. Los usuarios de sillas de ruedas están en continuo contacto con ellos y concentran gran parte de los gérmenes.

En Teyder estamos especializados en sillas de ruedas manuales y eléctricas. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

1 de abril de 2020 |

El uso de muñequeras te ayudará a recuperarte la fractura del metacarpiano

Si practicas boxeo, yudo, baloncesto o balonmano, seguramente habrás oído hablar de fractura de los metacarpianos. Una de las lesiones traumatológicas más frecuentes en este tipo de disciplinas y, además, una de las más habituales en la mano.

Sin embargo, que la fractura de los metacarpianos sea tan común en boxeadores o jugadores de baloncesto no significa que sea exclusiva de estos deportistas. Cualquier persona que sufra un impacto fuerte en esta zona, corre el riesgo de romperse alguno de los cinco huesos que unen los dedos con la muñeca y sufrir esta lesión. Un golpe, una caída o una tracción son suficientes para que esto pase y alguno de los huesos de la mano se resienta.

Y, aunque cualquier metacarpiano se puede ver comprometido, las fracturas más habituales son las siguientes:

Fracturas de los metacarpianos más habituales

1. Fractura de Bennett

Se trata de una fractura intraarticular simple con base en el primer metacarpiano, es decir, el que corresponde al dedo pulgar. Suele originarse al producirse un impacto fuerte con el pulgar flexionado. De ahí que esta lesión sea tan común en deportes de lucha y de contacto como el boxeo, el rugby o el fútbol americano.

Aunque no siempre, este tipo de fractura de los metacarpianos suele ir acompañada de un desplazamiento o alejamiento de los huesos entre sí. Un proceso que, en muchos casos, implica la aplicación de un tratamiento quirúrgico.

Quienes sufren una fractura de Bennett suelen presentar inflamación en la base y parte posterior del pulgar, dificultad de movimiento y dolor en la zona.

2. Fractura de Rolando

Al igual que la fractura de Bennett, la de Rolando afecta a la base del primer metacarpiano. Sin embargo, en este caso, se añade un componente de conminución: la fractura se presenta en diferentes fragmentos. Un hecho que dificulta el tratamiento de este tipo de lesiones.

Los síntomas más habituales en este tipo de fractura de los metacarpianos son dolor e inflamación del pulgar y deformidad en el primer metacarpiano.

teyder fractura de metacarpianos

3. Fractura del boxeador

Con este nombre se conoce la rotura del quinto hueso metacarpiano, es decir, el que corresponde dedo meñique. Se origina cuando, de forma accidental o intencionada, se golpea con el puño cerrado una superficie dura o persona. De ahí que la suelan sufrir, en su mayoría, boxeadores y deportistas que practiquen disciplinas de contacto.

Los síntomas más comunes tras una fractura de los metacarpianos de este tipo son dolor, inflamación e imposibilidad para mover el dedo.

La fractura de los metacarpianos es muy común en deportes de lucha y de contacto

A pesar de que cada fractura de los metracarpianos es diferente y, por tanto, también sus protocolos de actuación, hay procedimientos que son comunes a todas. Así, tras una lesión de este tipo, lo más frecuente es poner en práctica alguno de estos tratamientos.

 

Tratamiento para la fractura de los metacarpianos

1. Tratamiento ortopédico

  • Aplicar antiinflamatorios para bajar la inflamación y el dolor.
  • Inmovilizar la zona afectada con ayuda de una férula o una muñequera como la 205MN – 206MN, con férula palmar, o la 512MN, 518MND – 519MND o 725MN, con férula pulgar. Este tipo de ortesis no solo ayuda a estabilizar la zona mientras se consolida el hueso, sino que también la protege de golpes y de movimientos inadecuados durante la recuperación.

teyder fractura de metacarpianos

  • Después de 3 a 4 semanas de reposo, comenzará el periodo de rehabilitación. Siguiendo las indicaciones del especialista, realizaremos una serie de ejercicios que buscarán la movilización y fortalecimiento de los metacarpianos.

2. Tratamiento quirúrgico

Se suele optar por este tipo de tratamientos en aquellas fracturas de los metacarpianos que presentan inestabilidad. El tipo de cirugía a aplicar dependerá del tipo de lesión, pudiendo optarse por la colocación de tornillos o agujas de Kirschnner para estabilizar la zona.

Tras un periodo de 3 o 4 semanas de inmovilización y una vez consolidado el hueso, se iniciará un proceso de rehabilitación similar al del tratamiento ortopédico.

En Teyder estamos especializados en ortesis para tratar la fractura de los metacarpianos. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos