3 de febrero de 2021 |

Las tobilleras para esguinces ayudan en el tratamiento y prevención de esta lesión

 

Las personas que han sufrido un esguince de tobillo lo saben: presentar esta lesión es tan fácil como recaer en ella. Y es que, como explicamos en el artículo Esguince de tobillo: cómo evitar recaídas, un simple movimiento es suficiente para desestabilizar la zona, forzar el estiramiento de los ligamentos y padecer este trastorno. Pero, de la misma forma que es posible caer –o recaer- en esta lesión, lo es tratarla y prevenirla. Las tobilleras para esguinces están diseñadas para este fin.

Sin embargo, que su objetivo sea ayudar a la recuperación y evitar recaídas, no significa que las podamos utilizar todos por igual ni a todas horas. Deberemos tener en cuenta varios aspectos antes de hacerlo.

1. Gravedad de la lesión

No es lo mismo sufrir un esguince de grado I que una de grado II o III. La gravedad de la lesión es distinta y, con ello, el periodo de recuperación y las medidas a aplicar.

Será el especialista quien, después de una revisión, determine el nivel de afectación de los ligamentos y las pautas a seguir para tratarlos. Entre ellas, la tipología de tobilleras para esguinces a utilizar.

  • Grado I: es el más leve de los tres. A pesar de que provoca dolor por presión, el desagarro de las fibras es mínimo y prácticamente no hay inestabilidad al caminar. El uso de tobilleras para esguinces, en este caso, tiene como objetivo desinflamar la zona y calmar. Por eso, es recomendable optar por ortesis compresivas y con efecto masaje y drenaje como las Sport Teyder 313TB y 305TB..
  • Grado II: a diferencia del esguince de tobillo en grado I, provoca una ligera inestabilidad al caminar y hematoma en la zona. El desgarro las fibras y lesiones capsulares es mayor y, por tanto, también lo es el dolor. Hechos que hacen recomendable el uso de tobilleras para esguinces que, además de comprimir la articulación, aporten estabilidad y sujeción. Este sería el caso de la 284TB, la 889TB y la 551TB.

teyder tobillera para esguinces

  • Grado III: es el esguince más grave de los tres. Provoca el desgarro completo del ligamento con lesión en la capsula y, con ello, gran dolor e inestabilidad. De ahí que sea importante el uso de ortesis que ofrezcan estabilidad y compresión a la zona y reduzcan las molestias causadas por la lesión. La tobillera 250TB-251TB es perfecta para este fin.

El objetivo de las tobilleras para esguinces es ayudar a la recuperación de esta lesión y evitar recaídas

2. Fase de recuperación del paciente

Lo habitual es que las tobilleras para esguinces se utilicen en la primera fase de la lesión con el objetivo de calmar la zona y aliviar el dolor en su fase más crítica. Y es que, como hemos comentado, estas ortesis actúan como un potente analgésico y aportan calor, compresión y estabilización a la zona.

Sin embargo, pasado el tiempo estimado por el médico y siempre que una actividad profesional o deportiva no lo requiera, es conveniente prescindir de ellas y caminar sin su ayuda. ¿La razón? Las tobilleras para esguinces inmovilizan todo el tobillo por igual y su uso continuado puede producir la inactivación de elementos claves para la recuperación de la zona.

3. Factores de riesgo del paciente

Aunque lo recomendable es utilizar las tobilleras para esguinces en la primera fase de la lesión, existen excepciones. Este es el caso de las personas que, por el trabajo que desempeñan, por el deporte que practican o porque sufren inestabilidad en el tobillo, son propensas a sufrir recaídas. Tan solo ellas podrían usar ortesis después de su recuperación y hacerlo únicamente durante el desarrollo de su profesión o durante sus entrenamientos.

Para garantizar la estabilidad y comodidad del usuario, las tobilleras para esguinces deberían ser como la 884TBC o las Sport Teyder 313TB y 305TB: transpirables, sin costuras y de gran sujeción y estabilización. Además, su uso debería ir acompañado de ejercicios de fortalecimiento muscular y para la propiocepción y control postural.

En Teyder estamos especializados en tobilleras para esguinces. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te asesoraremos

15 de enero de 2019 |

La eficacia de una ortesis dependerá de una correcta toma de medidas

¿Te imaginas comprarte unos zapatos dos tallas mayores que la tuya? ¿Y unos pantalones tres por debajo? Sería incómodo caminar, sentarse e, incluso, hablar, ¿verdad? Pues con las ortesis pasa lo mismo. Para una buena sujeción y función deben ajustarse a la talla de cada persona y, para eso, es necesaria una correcta toma de medidas. Y más si tenemos en cuenta que, junto a la calidad del diseño y de los materiales utilizados en su fabricación, la talla es uno de los factores que determina la eficacia de una ortesis y, por tanto, la recuperación de una lesión.

En Teyder, conscientes de la importancia de la toma de medidas para la buena elección de ortesis, hemos querido ir un poco más allá y facilitar esta tarea al profesional farmacéutico y de ortopedia y al usuario final.

Por eso, ya sea en la web o en la caja de producto, encontrarás una tabla de medidas donde se especifica qué talla elegir dependiendo del perímetro de la zona a cubrir. Ésta variará en función del tipo de ortesis y, obviamente, de la edad del usuario. No es lo mismo un niño que un adulto y esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de decidirse por un producto ortopédico.

Toma de medidas en función de la ortesis

  • Fajas: para la toma de medidas deberemos revisar el perímetro de la cintura. Así, en ortesis como el soporte lumbar 871 FV de Angora Thermik o el 280 FV de Silver Line encontraremos hasta cuatro tallas diferentes: S, M, L y XL.
  • Muñequeras: en el caso de ortesis como la muñequera elástica ajustable 285 MN, la metacarpiana con férula palmar 286 MN (ambas de Silver Line) o la metacarpiana elástica 885 MN de Ecoelastic nos fijaremos en el perímetro de la muñeca antes de decantarnos por una talla u otra. Encontraremos, como en el caso de las fajas, hasta cuatro medidas diferentes: S, M, L y XL.
  • Coderas: si queremos que coderas como la 541 CD de Neothermik o la 882 CD de Ecoelastic se adapten a la zona y ejerzan una comprensión ligera sobre ella, deberemos medir el perímetro de esta articulación y tomar como referencia la tabla de medidas de Teyder. El tallaje variará, pudiendo encontrar productos S, la M, la L o la XL.
  • Rodilleras: en este caso, será necesario medir el perímetro de la rodilla a nivel de la rótula y elegir entre las diferentes ortesis de Teyder teniendo en cuenta este parámetro.
  • Tobilleras: la toma de medidas se efectuará sobre la articulación del tobillo, a nivel del maléolo. En función de su perímetro, podremos escoger entre cuatro tallajes diferentes.
  • Inmovilizadores de hombro: para escoger un inmovilizador de hombro como el 434 CH o el 436 CH, ambos de Prot Point Inmo, deberemos hacer una toma de medidas. Esta vez, del largo del antebrazo.
  • Inmovilizadores de clavícula: antes de elegir ortesis de clavícula como la 420 CH o la 421 CH, deberemos medir el perímetro del pecho y, en función del resultado, escoger entre las cuatro tallas existentes.

teyder toma de medidas

Talla única

A pesar de que la mayor parte de productos de ortopedia de Teyder disponen de una tabla para poder escoger la talla que se adapte mejor a nuestra contextura, hay una excepción: la gama de ortesis Sport One. Esta línea deportiva está fabricada en talla única, pudiendo utilizar el mismo producto personas de diferente complexión física y tamaño. ¿La razón? Dispone de un sistema de cinchas de Velcro que permite ajustar la ortesis al perímetro de la extremidad y autorregular la comprensión para garantizar su eficacia y comodidad.

 

En Teyder estamos especializados en ortesis técnicas para evitar y tratar lesiones. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

9 de mayo de 2017 |

Lesiones en manos, rodillas o tobillos son las más comunes en el baloncesto

La práctica del baloncesto conlleva giros, saltos y carreras de velocidad -entre otras- que pueden provocar diferentes tipos de lesiones. Mientras que las contusiones o fracturas provocadas por golpes son difíciles de prever, las que son fruto del esfuerzo o malos movimientos sí lo son. Aún así, hay algunas que se pueden sufrir fácilmente aunque haya una preparación física anterior.

Se puede decir que cada deporte provoca unas lesiones u otras. Así, las lesiones del running o las del esquí serán diferentes a las del baloncesto. A continuación detallaremos cuáles son las lesiones más comunes en la práctica del baloncesto, cómo tratarlas y qué ortesis técnicas te ayudarán a recuperarte.


Lesiones en la mano

El baloncesto es un deporte que se juega con la mano. Por ello, esta articulaculación se pone en riesgo al botar la pelota. Los más común son los esguinces o fracturas de dedo. Estos son debidos al botar la pelota que, un mal golpe de ésta en los dedos, puede provocar el esguince o fractura.

Estas lesiones -sobre todo en caso de rotura- son difíciles de curar debido a los ligamentos y tendones que componen los dedos y su sistema complejo. Por ello, son muchos los especialistas que recomiendan hacer reposo, aunque lo más adecuado siempre será que consultes a tu médico o fisioterapeuta.

lesiones de mano en baloncesto

El baloncesto es un deporte en que se activan tanto las extremidades superiores como las inferiores. Por ello, no sólo se sufren lesiones en las manos por el boteo de la pelota, sino que las piernas también pueden sufrir las consecuencias.

 

Lesiones en las piernas

Uno de los músculos de las piernas más afectados en la práctica de baloncesto es el cuádriceps femoral. La carga de tensión en esta zona por los movimientos que conlleva este deporte puede provocar una tendinitis rotuliana.

La mejor manera de evitar la aparición de este tipo de lesiones es ejercitando los músculos de las piernas con prácticas que no los sometan a mucho estrés. Sustituyendo el ciclismo o la natación por el running, por ejemplo, conseguiremos este objetivo.

 

Ejercitar de manera adecuada las diferentes zonas fortalecerá los músculos y disminuirá la aparición de estas lesiones


Lesiones en las rodillas

Las lesiones más frecuentes en las rodillas son la rotura del ligamento cruzado anterior y los ligamentos laterales. Pero no solo estas, sino que las lesiones de meniscos también son bastante comunes en la práctica de este deporte.

Los giros con los pies fijos en el suelo son uno de los causantes de la rotura de menisco. Por otro lado, un mal movimiento o una mala caída podrán provocar la rotura de los ligamentos.

La mejor manera para evitar este tipo de lesiones, en la medida de los posible, es ejercitando los músculos de la cadera y el resto de músculos de los isquiotibiales. De esta manera se fortalece esta zona y se disminuye el riesgo de sufrir este tipo de lesiones.

lesiones en el baloncesto

Existen diferentes rodilleras destinadas a favorecer la recuperación de este tipo de lesiones. Si la lesión ha sido de tal magnitud que te has tenido que someter a una operación, también hay ortesis técnicas pensadas para darte movilidad en la período postquirúrgico.

 

Una tobillera estabilizadora ayuda a sujetar el tobillo y evita la aparición de posibles lesiones

 

Lesiones en los tobillos

Estas se deben, como en la mayoría de lesiones de rodilla, a los giros, las caídas o malos gestos. Pero en este caso se añade, además, los momentos de carrera en que se tiene que ir al otro lado de la pista rápidamente. En estas situaciones se somete al tobillo a cierto estrés que puede provocar un esguince de tobillo.

Fortalecer los músculos que rodean el tobillo mediante ejercicios de equilibrio, ayudará a evitar la aparición de estas lesiones. El uso de una tobillera estabilizadora también protegerá esta articulación.

 

 

En Teyder disponemos de ortesis técnicas diseñadas para ayudar a la recuperación de lesiones debidas al baloncesto